por Miguel Mier | 1 de marzo de 2015
» “Estamos construyendo un mejor gobierno” responde PRI a González Iñárritu” Encabezado en La Jornada el 23 de febrero de 2015
Lo que logró Alejandro González Iñárritula noche del domingo 22 de febrero es algo histórico para nuestro México. La entrega de los Óscares es el momento más competitivo del año en la industria ícono de la economía americana. Tal cual, el cine es la industria cultural que mayor influencia tiene en las mentes de todos los habitantes del planeta y es una de las que mayores divisas le generan a Estados Unidos.
El hecho de que en esa esperada noche un mexicano ganara la mejor película, el mejor director, la mejor historia (escrita en inglés por alguien que creció hablando español) y la mejor cinematografía por otro mexicano en la misma cinta es algo que no creo que país alguno (fuera de Estados Unidos) haya podido vivir. Es como ganarse varias medallas de oro olímpicas, laCopa del Mundo, el Balón de Oro o el Premio Nobel. Son distinciones mundiales únicas que llenan de orgullo a naciones enteras.
Genial también el discurso de aceptación que dio Alejandro. Éste prodigio mexicano dedicó su triunfo a los mexicanos. Repartió honores parejo al sur y al norte del Rio Bravo. Primero, para los que viven en México, dijo rezar por que México encuentre el gobierno que se merece. Después, para los que viven en Estados Unidos, dijo esperar que nuestros migrantes sean tratados con la misma dignidad que recibieron aquellos que llegaron antes a ese país de migrantes. Me parece que el fondo y la forma de los mensajes de Iñárritufueron ilustres, acertados y respetuosos. Quizás incómodos para algunos porquela verdad no peca pero incomoda.
Esa incomodidad tomó forma de tuit y salió de la cuenta oficial del PRI nacional con el mensaje: “@PRI_Nacional: Coincidiendo en el orgullo mexicano, es un hecho que más que merecerlo estamos construyendo un mejor gobierno. Felicidades #GonzálezIñárritu”.
La respuesta del PRI nacional deja muy clara la estatura de cada interlocutor. El primero, Iñárritu, logrando una hazaña épica dedica su triunfo a los mexicanos, nos dignifica a todos en su mensaje. El segundo, el PRI nacional, el cual está pasando por una de las peores crisis de credibilidad, por problemas de corrupción y de inefectividad de gobierno, le responde al premiado en un tono jactancioso y defensivo. Cuando leí ese tuit me pareció la ilustración clara de la expresión: escupir para arriba. Validaron la memorable frase del diario BirtánicoThe Economist: no entienden que no entienden.
Los problemas de corrupción no son privativos de México. La semana pasada visité Panamá en un viaje de trabajo. Todos los periódicos y noticieros que veía cubrían el escándalo de corrupción que envuelve al reciente ex presidente Ricardo Martinelli. El asunto está en que el ex presidente durante su mandato cambió la constitución para facilitar las leyes de otorgamiento de contratos de gobierno. Por medio de esos cambios otorgó contratos multimillonarios en beneficio de empresas y amigos cercanos al presidente. El ministro de la suprema corte del gobierno de Martinelliquien hizo los cambios a las leyes sellama Alejandro Moncada Luna y también se vio beneficiado. Se le descubrió la compra de 2 departamentos de 5 millones de dólares y se le empezó un juicio por desfalco al erario público. Me tocó ver una entrevista del primo de Moncada Luna diciendo en televisión nacional que no querían saber nada de su hermano delincuente y corrupto. Que toda su familia lo rechazaba a él y a sus actos.
El caso se complica porque Moncada llega a un acuerdo con el nuevo fiscal, se declara culpable, le dictan 60 meses de cárcel y logra salir bajo fianza ese mismo día. Ahí es cuando el pueblo panameño se indigna. Me tocó ver escenas de calles tomadas pidiendo que Moncada Luna cumpla su condena en la cárcel como cualquier delincuente.
Ese día me traslado al aeropuerto en taxi y me doy cuenta que el taxista le sube al radio cuando sale la nota del caso Moncada. Me pareció curioso y le pregunté que si todos en Panamá estaban al pendiente del caso y me dijo que sí, que no permitirán que un corrupto que les robó salga libre bajo fianza. Los 25 minutos del trayecto al aeropuerto me estuvo expresando su indignación sobre políticos que roban millones impunemente mientras los ladrones comunes que roban 100 dólares pasan años en la cárcel purgando su delito. Cuando llegamos al aeropuerto se bajó de su taxi para terminar de explicarme los pormenores del caso. Me pareció admirable primero ver lo bien informado que estaba y segundo su reacción de indignación ante la corrupción. Me dio tristeza pensar cómo en México los escándalos de corrupción se vuelven parte del paisaje y los protagonistas conviven con la comunidad como si nada. A la vez me dio esperanza pensar que tenemos ejemplos cercanos de pueblos que realmente se indignan ante la corrupción.
Parafraseando a Iñárritu creo que tendremos el gobierno que nos merecemos cuando nos comportemos como los ciudadanos que debemos ser.
@MiguelMier
Yo no estoy de acuerdo con tu último comentario, definitivamente somos más los mexicanos buenos, que trabajamos y queremos un cambio, si bien hay gente sin escrúpulos, corrupta y tonta, tampoco podemos decir que es lo que nos merecemos por comportarnos de cierta manera, el cáncer está en la cabeza.